17 de noviembre de 2011

Gale Henry en Chinatown


The Detectress (1919), Gale Henry y Bruno C. Becker 

Gale Henry es otra de las princesas olvidadas del slapstick. Entre 1919 y 1920 llegó a tener productora propia, la Model Comedy Company, que distribuía sus películas de dos rollos a través de Bull’s Eye, una productora y distribuidora de comedias dirigida por Charles Parrot, alias “Charley Chase”. Después del preceptivo paso por los escenarios, Gale Henry había desembarcado en 1914 en la Universal, donde actuó en pequeños papeles junto con Louise Fazenda.


A un ritmo de película por semana no pasó mucho tiempo antes de que comenzara a protagonizar sus propias series. Fue así como en 1915 estuvo al frente de la docena de entregas de “Lady Baffles y el pato detective” producidas por Power Pictures, y en los que la señorita Henry ya mostraba su afición por el disfraz y por los pasajes secretos. 


A decir de los estudiosos, éste fue siempre el gran problema de la señorita Henry: asociarse con empresas que al poco se iban a pique. Lo mismo pasó con su propia compañía tras la agitada peripecia de su asociación con Bull’s Eye. No obstante, su encuentro con Charley Chase sería fructífero y Gale Henry fue digna compañera de payasadas del Max Linder americano en múltiples ocasiones, como en Mighty Like A Moose (1926) donde interpreta a una dama de la buena sociedad bailarina frenética de polka.


El principal aliciente de las comedias de Gale Henry vistas hoy en día es que nunca adopta un papel subsidiario del hombre. Nunca fue una ingenua. Ella está siempre en el centro del fotograma y corre por los tejados, se pega batacazos y reparte estacazos como el primero. Su físico desgarbado y su rostro expresivo son  propensos a la mueca. Un poco demasiado, para el gusto de hoy, pero sello de la casa en cualquier caso. Para llevar a cabo sus proezas cómicas, los argumentos suelen situarla en roles que entonces se consideraban masculinos.


Esto es lo que ocurre en The Detectress, el corto que ayer proyectamos en la carpa. Un viejo encuentra un viejo manuscrito que contiene la fórmula para crear una lente que permitiría distinguir los ingredientes de un chop-suey. Jip Yu (Eddie Baker), un villano que de chino sólo tiene el nombre se la roba y la lleva al antro de One Lung (Hap Ward), fumadero de opio y restaurante chino con más trampillas que un serial de la Republic.


Allí se cuela la detectivesa aficionada Lizzie (Gale Henry), (des)asistida por un inoperante agente de policía (Milburn Moranti). Una vez en Chinatown todo funciona un “cartoon” de Tex Avery: un carrusel de persecuciones a través de puertas giratorias, escotillones y pasadizos con escala obligada en la pileta del sótano del fumadero. Es en este punto, mecánico, variado siempre en sus repeticiones gracias a las expectativas cumplidas o burladas, reside lo mejor de esta comedia. Si no esperan ustedes la precisión en el gag de Keaton, la maestría mímica de Chaplin ni las espectaculares persecuciones de Larry Semon, pueden pasar un buen rato con The Detectress.


Desvelamos su final por lo súbito e inconsecuente del mismo. Toda esta pesadilla podría no ser otra cosa que la alucinación causada por el humo proveniente… ¿del fumadero de opio o del fogón en el que se cocina el chop-suey?


The Detectress (1919)
Producción: Model Comedy Company para Bull’s Eye (EEUU)
Director: Gale Henry y Bruno C. Becker.
Intérpretes: Gale Henry (Lizzie), Milburn Moranti (agente de policía), Hap Ward (One Lung), Eddie Baker (Jip Yu).
21 min. Blanco y negro + virados.


4 comentarios:

angeluco10 dijo...

No conozco ni a la actriz ni la película.
¡¡¡Cuánto cine silente me queda aún por descubrir!!!.

Sr. Feliú dijo...

Éste en concreto procede de un suculento recopilatorio norteamericano titulado The Slapstick Encyclopedia.

El Abuelito dijo...

Fantástica la serie de payasas elaborada, y muy desconocida, y encima con chinos de los que llevan coleta y fuman opio, como debe ser... ¡Cuánto se agradece la información!

Sr. Feliú dijo...

Todo es culpa de los germanotes del Filmmuseum, que se empeñaron en rescatar del olvido a las féminas del estudio de Hal Roach y como teníamos hace tiempo ganas de entrarle a la pareja Thod-Pitts...

Sus nietos, que bien le quieren