15 de abril de 2013

Transformismo en el Majestic




Viktor und Viktoria (1933), Reinhold Schünzel

Viktor (Hermann Thimig) es un transformista afónico y Susanne (Renate Müller), una cantante incapaz de encontrar trabajo. Se encuentran fortuitamente en una agencia teatral y, luego, en un restaurante de comida barata. Viktor le propone entonces que le sustituya por una noche en el el café donde se presentan números de variedades donde realiza un número de transformismo con el nombre de Viktoria.

Susanne acepta y logra tal éxito que el agente Francesco Alberto Punkertin (Aribert Wäscher), le ofrece un contrato para actuar en los principales teatros de Europa. A los dos les interesa mantener la comedia. De este modo, fuera del escenario Susanne se tendrá que seguir pasando por un hombre.


La situación no deja de ser paradójica, porque la primera actuación de Susanne en un auténtico éxito… de comedia bufa. Los tropiezos y caídas se suceden en el escenario mientras Viktor dirige desde el foso la actuación, tocando todos los instrumentos. Después de una gira triunfal Viktor y Viktoria recalan en el teatro Majestic de Londres. El problema es que ella / él se prenda del apuesto Robert (Anton Walbrook).


Lo más interesante de Viktor und Viktoria es que, aunque el argumento se desarrolla en el mundo del teatro musical, la música pone en solfa situaciones cotidianas, como más adelante hará Jacques Demy en Les parapluies de Cherbourg (Los paraguas de Cherburgo, 1964). Así, el primer tema musical desarrolla el encuentro entre Susanne y Viktor en la escalera de una agencia teatral y desarrolla asuntos tan sublimes como el catarro de él o la situación de desempleo de ella; o más adelante, la escena puramente musical en la que Robert y Susanne / Viktoria entran en una barbería.


En el escenario, en cambio, siempre asistimos a la representación de la misma canción, una espagnolade en toda regla con alusiones a Madrid y a la Carmen de Merimée, con sus olés y sus peinetas. Como estamos en una producción de la UFA todo es suntuoso, desde los decorados a los movimientos de cámara.


La peor parte se la lleva la siempre forzada actuación de Renate Müller vestida de hombre. Una larga escena bastante aburrida se desarrolla en el vestuario de hombres mientras ella espera para vestirse a que salgan todos los ocupantes. Entonces tenemos la oportunidad de ver cómo se maquillan y se preparan para la actuación el clown musical Kukuli, el forzudo Simson y un amaestrador de ocas cantarinas.


En el Majestic podemos asistir al cásico  número de puntería con ambientación western, a la actuación de un bailarín de claqué y al remedo de la declaración amorosa de Víktor a la chica que anuncia los números en el teatro (Friedel Pisetta) por unos perritos amaestrados vestidos de tiroleses.


Otro día hablamos de la magnífica versión realizada por Blake Edwards Victor / Victoria (¿Víctor o Victoria?, 1982), porque la película merece comentario propio.


Viktor und Viktoria (1933)
Producción: UFA (AL)
Guión y Dirección: Reinhold Schünzel.
Intérpretes: Renate Müller (Susanne Lohr), Hermann Thimig (Viktor Hempel), Anton Walbrook (Robert), Hilde Hildebrand (Ellinor), Friedel Pisetta (Lilian Schulze), Fritz Odemar (sir Douglas Sheppersfield), Aribert Wäscher (Francesco Alberto Punkertin), Ernst Behmer, Georg Georgi, Goroll, Karl Harbacher, Trude Lehmann, Hans Lorenzen, Henry Lorenzen, Herbert Paulmüller.
100 min. Blanco y negro.

2 comentarios:

angeluco10 dijo...

Conozco la de Blake Edwards pero no ésta.
Muchas gracias,la buscaré.

Sr. Feliú dijo...

La de Blake Edwards tiene un humor mucho más corrosivo. En cambio ésta no se limita al musical "backstage" sino que intenta integrar las canciones en el desarrollo de la trama. En cualquier caso, la comparación siempre resulta fructífera.

Gracias por sus comentarios, profesor Javier y Sr. Feliú