22 de septiembre de 2013

Tongolele y el Mago Chang (primera parte)


Han matado a Tongolele (1948), Roberto Gavaldón

No queremos irnos al otro barrio sin haber visto antes Han matado a Tongolele

Y no sólo por contemplar las evoluciones dancísticas de la bailarina exótica del mechón blanco sino porque en este primer vehículo estelar de Yolanda Montes la intriga se desarrolla entre bastidores, en lo que constituye todo un subgénero cinematográfico que alguna otra vez hemos denominado “crimen en el escenario”.

Emilio García Riera, eminente cronista del cine hecho en México, remata con el siguiente comentario el hecho de que Tongolele baile una danza de los Mares del Sur en un decorado oriental al ritmo de músicos antillanos: “la presencia felina de Tongolele daba carta de naturalidad a ese exotismo integral”.



Tongolele aterrizó en Tijuana en 1947. Aunque había nacido en Estados Unidos, la máquina publicitaria aprovechó sus rasgos exóticos para hacerla renacer en Tahití. Sus primeras incursiones en el cine mexicano –Nocturno de amor (1947), La mujer del otro (1948)- la utilizan como intermedio musical en bailables de aire antillano. Con tan escaso bagaje, Luis Manrique, el propietario de Producciones Juno, la contrata para compartir cabecera de cartel con el galán David Silva.



Roberto Gavaldón factura el encargo en poco menos de tres semanas, acuciado por la amenaza de huelga del Sindicato de Técnicos. El rodaje comienza el 12 de julio de 1948 y el 30 de septiembre se estrena en las salas de Ciudad de México. La película no ofrece mayor complicación puesto que se desarrolla prácticamente en el escenario único del teatro de variedades Follies, reconstruido en estudio, por supuesto. El Follies era una de las catedrales del teatro de variedades desde que en su escenario alcanzara la popularidad el cómico Mario Moreno “Cantinflas” en compañía de Shilinsky allá por 1936.

Entre las actuaciones musicales hemos encontrado a Los Tex Mex, Silvestre Méndez, Los Diablos del Ritmo, Andrés Huesca y sus Costeños y El Niño Caravaca y sus Gitanos.

Pero el epicentro de la red de celos y odio, es Tongolele, que además de ejecutar sus danzas exóticas y participar en el número de magia de Chang (Seki Sano), lleva una vida sentimental complicadísima lo que hace que el número de sospechosos se multiplique. ¿Será el propietario del Follies (José Baviera), que ve como su estrella principal le abandona para casarse? ¿Será su prometido, celoso del celoso mago Chang? No son preguntas retóricas. Desconocemos la respuesta porque ya les hemos dicho que no hemos podido ver la película… Cuando lo logremos, haremos la segunda parte.

Han matado a Tongolele (1948)
Producción: Producciones Juno (MX)
Director: Roberto Gavaldón
Guión: Roberto Gavaldón, de un argumento de Ramón Obón.
Intérpretes: Yolanda Montes “Tongolele” (Tongolele), David Silva (Carlos Blanco), Seki Sano (el mago Chang), Concepción Lee (Lotto, la mujer del mago), Ildefonso Vega (el ayudante de Chang), Manuel Arvide (Marcel), Lilia Prado (Clarita), José Baviera (el empresario), Lila Kiwa (Lila), Julián de Meriche (el director de escena), Armando Velasco, Jorge Mondragón.
72 min. Blanco y negro.

1 comentario:

Angel San Miguel dijo...

Jamás oí hablar de Tongolele.
Ignorante que es uno.